Señala Andrés Manuel que "sólo el pueblo puede salvar al pueblo". Ojalá los mexicanos sepamos ver donde está realmente el peligro para México y su pueblo esta vez no se deje llevar por las mentiras publicitarias y por la estrategia de terror que hoy vivimos y que en las próximas elecciones se vote masivamente por un verdadero cambio para bien del país.
Octavio Rodríguez Araujo
El Movimiento Regeneración Nacional AC (Morena) es para mí un soplo fresco de esperanza. Me voy a olvidar por hoy de las elecciones federales próximas e incluso de los partidos políticos. Hay mucho tiempo por delante para escribir sobre ellos.
Esta vez quiero referirme a la importancia que veo en un movimiento social, que tiene mucho de político sin serlo (todavía), para el futuro del país. Debe quedar claro que no soy contrario a los partidos, que no defiendo las mal llamadas candidaturas independientes ni mucho menos la imposible democracia directa (véase mi artículo en Este País,246, octubre de 2011), pero el esfuerzo de organizar a la sociedad con y sin partido y hasta de varios partidos es algo que no había ocurrido en México desde hace muchos años. Intentos los ha habido, desde luego, pero no funcionaron bien o se fueron desdibujando con el tiempo hasta desaparecer.
Movimientos sociales hay muchos, hasta podría decirse que cada día surgen nuevos. Pero lo que este fenómeno demuestra es que la sociedad que quisiera organizarse carece de líderes que la aglutinen y el resultado es la dispersión que todos conocemos. El hecho mismo de que existan muchos movimientos y agrupaciones sociales demuestra, sin proponérselo, su debilidad. La atomización es signo de raquitismo, pues no es lo mismo muchos en uno que muchos unos sin identificación ni coordinación con otros. Morena es un movimiento con líder y compuesto por muchos que se identifican con este líder y con un proyecto de nación ampliamente difundido y alternativo en muchos sentidos al existente. Por si fuera poco, es un movimiento plural, tanto que ha convocado a algunas personas que incluso me caen mal. Pero ni modo, ahí están, ahí estamos, y por ahora pospongo mis diferencias con quien las tenga. Es mi convicción que sólo unidos podremos hacer algo positivo, si son más las coincidencias que las diferencias.
No es la primera vez que tengo esta sensación de unirme y participar a pesar de pequeños desacuerdos y antipatías personales. Cuando me sumé al zapatismo chiapaneco, en 1994, hubo muchos aspectos con los que no estuve de acuerdo, pero ahí había un mensaje de cambio, de lucha, de esperanza, y los mexicanos (y no pocos extranjeros) quedamos emplazados: o estábamos con el EZLN o no. No haber estado con los zapatistas era equivalente a darle la espalda a los más pobres de los pobres de México y otras latitudes. Era equivalente a traicionar todo aquello por lo que los izquierdistas de años habíamos luchado. El punto clave en los primeros años del movimiento zapatista, cuando era incluyente más que lo contrario, era posponer las diferencias, que obviamente las había, y sumarnos con ellas y nuestras coincidencias para lograr lo que muchos deseábamos y todavía queremos: un país con justicia social, distribución de la riqueza, menores desigualdades, gente menos jodida. Las cosas no salieron bien y ni modo, pero hicimos lo que nos tocaba hacer. La historia, como bien lo sabemos los viejos, no se construye de un día para otro ni al primer intento.
Morena es otro esfuerzo de sumar y, nuevamente, una vez más, estamos convocados a estar con el grueso de quienes lo componen y su líder o darles la espalda, lo que equivale a apoyar al poder en sus mil disfraces y alianzas públicas o soterradas, pero poder al fin. Para mí es la hora de las definiciones, el momento de colgar del perchero nuestras diferencias y viejas discusiones, sumar y entre todos enriquecernos para las próximas elecciones y para más allá de éstas. Una frase que me gusta de López Obrador es que sólo el pueblo puede salvar al pueblo. Una excelente síntesis. No puede ser de otra manera, y para que el pueblo pueda salvarse tiene que dar una batalla descomunal, y ésta no se puede llevar a cabo con dispersión, sino sólo unidos en organización y propósitos. Esta es la clave.
Morena, así como asociación civil, se enlaza con las elecciones más que con los partidos en general porque, con su organización en todo el país, está en condiciones de participar en las casillas electorales y cerca de éstas para evitar otro fraude como los habidos en 1988 y 2006. Igual importarán los votos de quienes pertenecen o se identifican con Morena. Votar por los candidatos de los partidos de la no muy conspicua izquierda, aunque tengamos diferencias con algunos, será también muy importante, pues de no hacerlo, de abstenernos o anular nuestro voto, será equivalente a dejar que priístas, panistas y hasta verdes y gordillistas terminen por representarnos en el Ejecutivo y en el Congreso de la Unión.
Que quede claro que si las encuestas favorecen a Marcelo Ebrard y sus aliados panistas y perredistas (los chuchos), que espero no ocurra, me temblará tanto la mano a la hora de la votación que quizá se me pase el marcador y sin querer anule mi voto al cruzar más de un cuadrito. Ni modo, pero que conste que aun así trataré de votar por él pese a que tal vez no lo logre. Prefiero a López Obrador y espero, aquí sí, que las encuestas lo favorezcan. Es tan buen precandidato que todos los del poder o cercanos a éste están en su contra. Ningún otro precandidato podría decir –con orgullo y sinceridad– lo mismo en estos momentos, y la situación nacional, agravada por más de 25 años de priísmo y panismo neoliberales, ineficaces y sumisos a Washington, obliga a luchar por un cambio auténtico, aunque no sea ni pueda ser radical. Otra vez la historia: poco a poco.
MONTERREY, Nuevo León, 5 de octubre (GOBIERNO LEGITIMO) Durante la reunión que sostuvo con empresarios en el Centro Internacional de Negocios de Nuevo León, Andrés Manuel López Obrador aclaró que si gana el candidato del Movimiento Regeneración Nacional las elecciones presidenciales del próximo año no manejará la economía con una visión ideológica, sino manejará la economía con juicio práctico.
Indicó que un ejemplo claro de manejar la economía con juicio práctico es producir las gasolinas en el país, a partir de la construcción de nuevas refinerías y dejar de importar el hidrocarburo para reducir el costo de los combustibles para beneficio del consumidor, de pequeños, medianos y grandes empresarios.
Calificó de irresponsable el actual manejo de la política petrolera de México, porque el gobierno espurio vende el petróleo crudo al extranjero y se compran 400 barriles diarios de gasolina, porque desde hace 30 años no se construye ni una refinería.
Manifestó que hay un negocio en la compra de la gasolina, porque no se sabe quién compra, cómo se compra, cómo se distribuye y el grave problema que hay es la corrupción que existe en órganos gubernamentales, en las empresas estatales como Petróleos Mexicanos.
Acompañado por el responsable de Política Antimonopolio y Sector Empresarial del Movimiento Regeneración Nacional, Fernando Turner, así como por los empresarios regiomontanos: Alfonso Romo y Malaquías Aguirre, López Obrador indicó que se terminarán con los negocios que se llevan a cabo a costa de los bienes de la nación.
Durante la sesión de preguntas y respuestas, López Obrador aseguró que el Movimiento Regeneración Nacional está organizado para defender los votos de los mexicanos e impedir que se lleve a cabo otro fraude electoral en las próximas elecciones presidenciales.
“Ahora ya tenemos organización, ya contamos con comités municipales en todo el país, ya se tiene hasta ahora cerca de 38 mil comités seccionales y se cuenta con protagonistas del cambio verdadero”, informó.
Al recordar que en Nuevo León fue el estado donde más personas participaron en el fraude electoral de 2006, López Obrador comparó a los priistas y los panistas de arriba son lo mismo, comen en el mismo plato, Salinas de Gortari son lo mismo que Vicente Fox, Enrique Peña Nieto es igual que Felipe Calderón.
Sobre el tema de la inseguridad que padece el país, el presidente legítimo de México contestó que se tiene que atender las causas que originaron el flagelo y explicó que el problema se relaciona por la falta de crecimiento económico, por el desempleo y el abandono a los jóvenes para que tuvieran posibilidad de estudio y trabajo, además se le anexa la pérdida de valores.
Aclaró que la violencia e inseguridad no se resolverá con medidas coercitivas, con el uso del Ejército, de la Marina, con cárceles, con amenazas de mano dura o leyes más severas, porque la paz y la tranquilidad son fruto de la justicia. “La mejor forma de enfrentar el problema de la inseguridad y la violencia es combatiendo la pobreza, creando oportunidades, echado a andar la economía, creando empleos y mejorando los valores”, propuso.
Indicó que Felipe Calderón debería de cambiar su estrategia de combate a la delincuencia por visitar a los jóvenes casa por casa para que se incorporen al trabajo y el estudio, en vez de que andan en las calles.
También, indicó, que es necesario terminar el régimen de corrupción en las corporaciones policiacas, dar buenos sueldos a los elementos policiacos, lograr la coordinación con las direcciones de seguridad y los diferentes niveles de gobierno en todo el país para bajar los niveles de delincuencia en el país.
Al calificar a Monterrey como una ciudad progresista y con gente buena, el presidente legítimo de México inició su discurso diciendo que el Movimiento Regeneración Nacional necesita un cambio verdadero de la vida pública del país en los órdenes: político, social y económica.
Explicó que la transformación de México es necesaria, porque el régimen de corrupción, de injusticias y de privilegios ya dio de sí, y si no hay un cambio de régimen no vamos a poder frenar la degradación progresiva.
Antes de terminar su intervención, el presidente legítimo de México comentó en este año conoció al empresario Alfonso Romo, quien es una persona que tiene convicciones y es bisnieto de Gustavo A. Madero, que su tío bisabuelo era el apóstol de la democracia Francisco I. Madero.
Rememoró la historia de Francisco I. Madero, quien siendo de una familia acomodada y haciéndole caso a su doctrina, a su filosofía, a sus pensamientos, llegó a la conclusión de decidirse a favor de un cambio y por ello “no se puede hacer nada en la vida, sino se tiene un ideal, sino se tiene una doctrina, sino se tiene una filosofía.
Mencionó que Madero es un ejemplo a seguir y explica en mucho, porque Alfonso Romo apoya el Movimiento Regeneración Nacional (MORENA).
Al hacer referencia del responsable de Política Antimonopolio y Sector Empresarial de MORENA, Fernando Turner, expresó que es una persona con dimensión social y no olvida de dónde viene.
Al dar su punto de vista de lo que significa México en cifras, el empresario regiomontano, Alfonso Romo reconoció que no han funcionado las acciones políticas, económicas y sociales emprendidas por gobiernos priistas y panistas en los últimos 70 años.
Para muestra un botón, detalló que participó en el supuesto cambio que emprendió el PAN con la llegada de Vicente Fox a la Presidencia de la República, sin embargo en los últimos 10 años de gobierno blanquiazul solo ha servido “para aumentar las desigualdades”.
Admitió que fue intolerante y fue en contra de la ideología de quien era candidato de las izquierdas en 2006, Andrés Manuel López Obrador, porque lo hicieron creer que llegaría un ogro a gobernar la Presidencia de la República.
Tiempo después, rememoró, conoció al presidente legítimo de México a quien le dijo que los empresarios no es solo un creador de empleos, sino tienen la misión de crear mucha riqueza a través de muchos empresarios independientes y la riqueza se distribuye sola.
Explicó que asistió a la reunión con empresarios, porque por un lado el PRI eligió a Humberto Moreira quien es una persona que representa al emblema de la corrupción e impunidad de México, “y yo ahí soy intolerante ante la corrupción y la impunidad.
Comentó que al PAN ya se le dio la oportunidad, 12 años de lo mismo y retomó las palabras de López Obrador: “pero ya no más de lo mismo” y propuso “vamos a construir una ciudad donde se dignifique a la persona, donde trabaje el sector social, empresarial y política y vamos a hacer este país un ejemplo de clase mundial”.
Resumió un mandato que les dio López Obrador: la verdadera reforma fiscal es aquella que cuando un individuo con imaginación e iniciativa levanta la mano, le fluye el capital, los recursos para crear riquezas, si esa es la filosofía a México lo cambiamos rápido.
Más tarde brindó una conferencia de prensa, Andrés Manuel López Obrador afirmó que Enrique Peña Nieto es el candidato a vencer en las elecciones de 2012, porque es el candidato de los que mandan en México, de los chipocludos, de los machuchones.
Al manifestar su respeto al jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Marcelo Ebrard, el presidente legítimo de México mencionó que la gente será quien decida quien esté mejor posicionado para que sea el candidato de las izquierdas y de las fuerzas progresistas.
Dio a conocer su propuesta de política exterior que se basa en una política de cooperación para el desarrollo entre México y Estados Unidos, más no poniendo el acento en la cooperación militar y en el marco en el respeto a nuestro país, porque no queremos ser colonia de ninguna nación.
Detalló que la reunión con empresarios sirvió para informar que MORENA respeta a la persona que invierte, al que genera empleos y estamos en contra de la corrupción, de la riqueza mal habida, no del hombre o de la mujer que con esfuerzos y trabajo logran un patrimonio.
Además detalló que planteó a los empresarios que no haya monopolios en el país, que haya competencia y libre mercado para que haya democracia en México.
En otro tema, subrayó que Televisa quiere imponer a su candidato del PRI, Enrique Peña Nieto a la Presidencia de la República, y aunque lo impongan no se solucionarán los graves y grandes problemas nacionales.
López Obrador mencionó que apoya moralmente al Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, encabezado por el poeta Javier Sicilia encabeza, porque es un movimiento justo que busca que haya un cambio en la política para combatir a la delincuencia que ha causado mucho dolor a los mexicanos.
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